Ensayo en la esquina

En un mundo lleno de msn, facebook y mail cadena. Es un refresco al alma ver que la gente se sigue juntando en la esquina a tomar algo y charlar cara a cara. Un poco de música al solcito, tomando un fernet. Esto fue lo que me encontré mientras volvía del trabajo en una tarde. Brindo por las juntadas entre amigos en una esquina del barrio.

Abierto

Caminando encontré una ventana abierta, durante el mediodía de octubre. Estaba abierta de par en par, pero no. Unos finos barrotes bloqueaban en paso al desconocido y unas cortinas no dejaban pasar el sol. Quiero ventanas de verano, que dejan pasar la fresca brisa de una noche de febrero, quiero ventanas de barrios olvidados en el tiempo, con vecinas asomadas chusmeando el nuevo romance de la cuadra, quiero ventanas con gatos en la cornisa, durmiendo la siesta o perros mirando la gente pasar. Pero por sobre todas las cosas, quiero que dejes tu ventana abierta para que pueda entrar a visitarte una noche, cualquier noche, y despertarte con un beso en tus labios dormidos.

Lavando a Hendrix

Volvía de caminar por parque Rivadavia y ví sobre la boca del subte, colgada ropa en perchas. Me llamó la atención una remera de Hendrix y me acerqué pensando que estaban a la venta. La ropa no estaba en venta, sino que alguien las había lavado en el balde rojo y las había colgado para secarse. Lástima, me gustaba la remera de Hendrix.

Horizontes distintos

Ya no estamos juntos, y qué?. Ambos sabíamos que el para siempre dura lo que dura la noche de sueño luego de leer la Cenicienta. Si lo que comenzó como una vuelta en la montaña rusa del Italpark, terminó siendo un paseo en bote en la pelopincho de casa en una tarde de julio. Si perderme en tus curvas te parecía ridículo, no es de extrañar que haya comenzado a tomar atajos rectos que llevan siempre al mismo lugar. Si te tenía que explicar lo que me hacías sentir, no es de extrañar que haya perdido significado, si esas cosas no se deben explicar. Pero ya me bajé del bote, y no, no hace falta que me devuelvas la plata, ya pasé por caja antes de venir. Igualmente, es toda tuya, estas monedas no me sirven en la plaza donde estoy jugando ahora.
Caminamos los mismos caminos, pero siempre miramos en direcciones opuestas, y está bien, tu horizonte nunca fué el mío. Hoy quizás estemos mirando el mismo horizonte, pero hoy tomaremos nuestra propia dirección. Ambos tenemos sábanas frías que nos están esperando.

Inalcanzable

Es que a veces la vida nos mira con esa cara de desdén, que nos empequeñece el alma y las aspiraciones. Nos sentimos como niños, saltando, tratando de alcanzar el alfajor que está arriba de la estantería, y seguimos saltando sin prestarle atención a la silla que tenemos al lado. Nos cansamos, insultamos y pateamos la silla. Es que lo más inalcanzable, con ayuda se acerca al alcance de la mano.

Charla en San Telmo

Al atardecer

Siluetas en un atardecer en Buenos Aires, con la nostalgia porteña de una tarde primaveral.

Naranja entre los grises

Y vos, radiante y naranja, resaltás entre medio de los grises de esta ciudad.

Artesanos San Telmo

Pequeña serie de fotos de algunos artesanos en San Telmo. La feria de San Telmo es una feria practicamente dedicada al turismo extranjero. Es un mix de artesanías porteñas, salpicadas con algunas cosas del interior del país. Obviamente, los precios que se manejan son más para un target que trae dólares que para el mercado interno que gana en pesos. Aún así, es un hermoso paseo para realizar.

Oficina al Aire Libre

Pequeña sesión de fotos de cuando fuí a tramitar el pasaporte. Como seguía teniendo tiempo libre, me fuí a dar una vuelta por una plaza cercana. Allí me encontré con este grupo de chicos que estaban tirados en el césped charlando. Cuando les pregunté que andaban haciendo me respondieron que estaban trabajando y que esa era su oficina.

Descansando

Plaza Street Art

Cuando el gris cemento es salpicado por colores y formas, todo es un mágico contraste que llena de magia los sentidos.

El paso de vos

Como un escalofrío que pasa lentamente por la espalda, que deja el alma a la vista del mundo, a merced de un lobo hambriento que solo busca comerse lo que alguna vez fué hermoso y puro. Hoy es un amargo recuerdo que seca la garganta y empapa las mejillas.

Puedes ver la luz?

Si, los dos estamos en esta misma oscuridad. Pero puedes ver la luz a lo lejos?. Los dos nos estamos golpeando con las mismas puntas de mesas que se atraviesan. Pero puedes ver la luz a lo lejos?. Dame tu mano y no me sueltes, falta muy poco para que esta negra travesía termine. Puedes ver la luz a lo lejos?. No me sueltes que temo no poder encontrarte después. Yo sé que tus golpes pueden doler más que los que yo he recibido, pero yo también tengo mis cicatrices. Puedes sentir ya la luz?. Ya casi hemos llegado, por favor no me sueltes, no te sueltes de mí.

Rosas

Perdidas en el recuerdo de un viejo amor, marchitándose como se marchitan algunos recuerdos que alguna vez fueron cálidos. Momentos que fueron coloridos hoy tienen tonos azules fríos.

Angel

Una simpatica pintada de un angel a la vuelta de mi trabajo. Con ese efecto particular que le da la fotografía estenopeica, como volando hacia el cuarto de algún niño que está triste.

Cuadricula Luminosa

Y que en cada cuadro halla un nuevo amanecer en un horizonte visto por primera vez.

A contraluz

A veces somos una sombra, a veces nos definimos por la luz que no dejamos pasar, la que capturamos para nosotros. A veces no proyectamos otra cosa que una forma indefinida en el piso, llena de dudas y temores. Otras veces irradiamos la luz que reflejamos y proyectamos colores en un espejo de agua. Somos lo que hacemos con la luz que nos llega, somos como dejamos que nos vean. A veces dejo que sólo vean mi sombra, porque mi sombra siempre será sombra y nadie la puede destruir. A veces, muy pocas, dejo que me vean reflejado en un lago, dejo mi alma expuesta. A veces el que la vió, arrojó una piedra al agua, quizás jugando, agitando mi reflejo y deformándolo. Y yo, que a veces no entiendo algunos juegos, salgo corriendo y me escondo, hasta que las aguas se tranquilicen, y mi reflejo sea el mismo de siempre.

Espiando

Mirando el interior de un edificio a través de una reja, como pequeñas ventanitas con peculiares formas.

Ataque Robotico

Un simpático mural de un robot. Sacado con mi cámara de 35 mm estenopeica.

Sonriente

Quiero dibujar una sonrisa contagiosa en la pared, para que todo el que la vea pueda sonreir de la misma manera que yo sonreí cuando la dibujé. Quiero ver la gente caminando con una sonrisa a cuestas y una maraña de problemas arrojados al piso.

Serie Caminantes

Acá van 3 fotos de la serie que hice mientras desayunaba en un bar por el centro, En dos de ellas los retratados se dieron cuenta que estaba sacando fotos y miraron hacia la cámara. Sin embargo, ninguno de ellos dijo nada. Solo se limitaron a mirar con curiosidad y seguir de largo.

Absorto

Tantas veces caminamos sobre nuestras mismas pisadas, yendo siempre para el mismo lugar, encerrados en nuestro propio mundo que no vemos nada de los demás. Nos resignamos tantas veces a ese individualismo sin darnos cuenta que mucha gente está esperando un "hola", una sonrisa, para abrir su propio mundo. Una de las cosas que me enseñó la fotografía es eso. Que mucha gente está esperando ese guiño para abrirse, que no toda la gente quiere estar encerrada en su propio mundo.

A paso lento

Mirando hacia atras

La semana pasada fuí a tramitar el pasaporte al centro. Como tenía que esperar mucho para mi turno (tenía 200 personas delante mío!), me fuí a un bar a desayunar y de paso saqué fotos a la gente que pasaba por la vereda. Lo que hice fue apuntar hacia un lugar y retratar a la gente caminando. De esta manera, la gente no se daba mucha cuenta si los retrataba a ellos o a otra cosa.

Entre gotas y cristal

Pintando un lienzo negro con colores fugaces, escapando a la ley de que todo tiene que ser blanco o negro. Escapando a la rutina de que todo tiene un significado y que no hay excepciones a las reglas. Escapando del conformismo que nos dice a donde ir y que querer. Escapando a las necesidades creadas, sé que lo que necesito no se puede comprar y que lo que tengo no tiene precio de reventa.

Luces en la noche

En una noche de lluvia, con el asfalto mojado que refleja las luces de la autopista hay un lugar a donde quiero llegar, que no sé donde es, pero sé que estás vos ahí.

Dave Matthews Band

El viernes pasado tuve la oportunidad de ver a la Dave Matthews Band en vivo en el Pepsi Music. Esta banda la conocí hace ya más de 10 años y se convirtió desde ese momento en mi banda de cabecera. Siempre se estuvo rumoreando q iban a venir pero nunca se concretaba. Finalmente, luego de 10 años, tuve la oportunidad de verlos. No tengo palabras para decir lo increíble que fué ese recital, todavía siento que estoy ahí, escuchándolos tocar. Realmente es una experiencia que no me voy a olvidar nunca.

Un arreglo tallado en madera de una puerta.

Esperando

El espera la noche, yo te espero a vos. Quizás nos encuentres juntos esperando, quizás veas mi sombra en el piso, ella también te espera. Pero no te voy a mentir, el farol espera la noche y al amanecer comienza a esperar nuevamente, yo en cambio, te esperaré hasta el anochecer, el amanecer de un nuevo día me encontrará en otro lado. Quizás juntos, quizás vos por otro lado.

Esperando bajo la lluvia

El sonido de las gotas golpeando el techo del auto, las luces de freno de los autos de adelante me encandilan y se multiplican en el parabrisas mojado. Gente corriendo, escapando del agua, buscando un refugio. Imágenes de vidrios empañados y figuras llenas de sensualidad que bailan trás de él. Todo está lleno de un extasis húmedo que invita a la excitación.

Jeep

Siempre quise tener un Jeep para viajar, enfilar hacia una ruta y no parar hasta el anochecer. Meterme por esos caminos secundarios que llevan a quien sabe donde, perderme a propósito, como me quiero perder en vos.

Torino

Recuerdo que mi viejo tenía un Torino. Recuerdo que aprendí a manejar con ese auto. Me sentía tan chiquito ahí dentro, creía que me iba a chocar contra todo lo que había en la calle. Me acuerdo a mi viejo enseñandome a manejar, lo nervioso que me ponía, lo tensionado y contracturado que bajaba del auto. Aún así me quedó un buen recuerdo de todo eso.

Autos Fantasmas

Siguiendo con la fotografía estenopeica, esta vez en 35 mm. Unos autos pasando por la calle, como fantasmas sobre el asfalto, un decorado de esta ciudad tan contrastada.

Viento en el Césped

Acostado sobre el césped, mirando a un panadero que el viento hace bailar a su capricho. Yo me quedo mirando, esa fragilidad de la flor que se esparse por el aire al primer suspiro y ese panadero ya deja de ser visible y se convierte en una mancha blanca sobre el papel, pero no importa como quiera ocultar su fragilidad, yo sé como es y me olvido de su rudeza y solo quiero cuidarlo.