En este 12 de octubre, donde algunos festejan el día de la raza. Recordemos con dolor, el asesinato de millones de indígenas; dueños originales de estas tierras. Un ejemplo aún vigente de la avaricia del ser humano, por querer dominar y conquistar lo que por naturaleza es libre.
No cometamos el mismo error, tratando de apropiarnos la libertad ajena. Respetemos el estado natural de las cosas y las personas.