10 agosto 2008
Muelle
Un pequeño muelle en el jardín japonés. Siempre me gustó el simbolismo del muelle. Esa imagen de la mujer que espera a su amado regresar de tierras lejanas. Esas esperas de meses y a veces años, esa esperanza diaria de que hoy puede ser el día de la misma manera que puede ser dentro de años o quizás nunca. Amores de épocas donde el "para siempre" duraba toda la vida.
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2 comentarios:
sí. llegué tarde. acá el "para siempre" no dura toda la vida. acá se hacen eternos segundos mientras los minutos tiritan de frio en el reloj. nada es igual, sólo queda sentarse a esperar. el jardín ya no florece, pero perfectamente me imaginé a "ella", en esa dulce y constante espera, con la mirada perdida en la sombra de un adios, de esos que sí vuelven.. acá ya cada vez vuelven menos, las margaritas se deshojan porque sí, y la luna se estremece al escuchar el hasta luego de un beso tierno, casi inocente, pálido y frío.
perdón, no quise llenar de tristeza este cuadradito que me reprocha huir, pero no me podía ir sin dejar impreso lo que me reflejo tu post.. dejame decirte que tu espacio es sumamente intenso.. y es que intenso para mí tiene tantos significados...
un beso y feliciaciones por esto.
me tome el atrevimiento, te encontre en hojas del camino de la amiga celes, y te puse como un gnomo mío más para visitar seguido.. espero no moleste ^^
pd:gracias celes por traerme hasta acá.
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